miércoles, septiembre 02, 2009

La encuesta perfecta (o como sacar la sopa)

Me dejaron hacer una encuesta en la escuela, pero como no aguanté las carotas de la gente cuando iba a tocarles la puerta y me cansé por que me tocaron puros edificios, al último mejor me puse a rellenarlas yo solito y mientras lo hacía, a la discre, me asomaba al depa de enfrente donde estaba una chava que se estaba encuerando. Ni cuenta se dio el maestro y hasta me felicitó por ser el primero en terminar ¡ja, ja, ja! Si supiera que puro taco de ojo, lo bueno es que le atiné al candidato ganador, creo que me gané un punto por eso.
La labor del espionaje y las encuestas, son dos elementos donde hay un montón de historias de personas que confiesan lo inimaginable, a precio de un mendigo café, el ejemplo más cercano es la noticia que salió en la revista Proceso de cómo sacó el CISEN mucha de la información que poseía para predecir, entre otras cosas, los eventos en contra de gobierno, así como la ubicación y agenda de gente poderosa a la que se tiene que tener vigilada todo el tiempo.
¿Cómo crees que sacaba la información el CISEN? Pues invitaba un café al gato del gato del gato y le sacaban toda la Maruchan.
A veces, dice el articulo, los soplones comentaban -es que manito (los tratan como amigos) debo la renta y estoy preocupado, -¿Cuánto es de renta?, replicaban -800 pesos contestaba, -No te preocupes, toma este cheque y ahí muere.
El caso de las encuestas es otro cantar sobre lo mismo, hay que considerar que la encuesta es elemental en los estudios de mercado, y los estudios de mercado son la panacea de partidos políticos y brújula –suponen unos- de las preferencias de la mayoría consumidora considerando que se puedan obtener ganancias con este conocimiento.
Hay un elemento que ha dañado a la aplicación de la encuestas ya que algunas personas utilizan las encuestas para promocionar tal o cual producto, servicio o candidato, aprovechándose del evento psicológico de que cuando confiesas tus pensamientos aparte de la indefensión psicológica, dejas abierto tu concepto sobre el elemento tratado, se abre la posibilidad de cambiar estos conceptos y con ellos cambiar tu idea de lo que sea que traten de venderte. Esto ha dañado la inicial confianza que tiene el encuestado en la supuesta transparencia de las encuestas (digo supuesta porque siempre tienen una oculta intención).
Otro punto en contra de las encuestas es el problema del planteamiento de la pregunta (grandioso, hemos dado con otro tema), y es que se pueden manipularse para obtener cierta reacción del encuestado, además de no tomar en cuenta el estado anímico de quien hace y responde la pregunta.
Me encontré una vez a un señor que se llama Alonso de la Colina y que resulta ser uno de los meros meros de TV Azteca Guerrero y platicando de las encuestas me dijo que las encuestas no pueden ser buen reflejo del pensamiento de la masa en la medida en que restringen su muestra, esto es, si haces una encuestas por teléfono, no estás tomando en cuenta el hecho de que solo un 30% (ya no me acuerdo bien del porcentaje) tiene acceso a una línea, eso quiere decir que estas dejando de tomar la opinión de un sector de la sociedad -en este caso más jodido económicamente- que puede tener una opinión divergente (es casi seguro) a ciudadanos cuyos ingresos le permitan contratar y mantener un servicio telefónico particular.
Hace tiempo unos compas lanzaron una teoría llamada Teoría social critica, se ve que tienen una opinión medio cañon de las encuestas, dicen algo así como que la gente no somos simples números que no cambian de opinión como lo han considerado los investigadores de la comunicación de las masas (Mass communication research), si no que hay que dejar a un lado la visión comercial y cuadradota, para considerar el factor social e histórico del pensamiento de la generalidad, meterse pues, en el quién, cómo y porqué, de las decisiones de la gente.
Uno de estos camaradas de la Teoría social crítica que se llamaba Theodor Ludwig Wiesengrund (pero le gustaba que le dijeran Theodor Adorno, gracias a dios) decía que eran dos puntos de vista diferentes de ver a las masas (pueblo) por que vienen de dos “proyectos históricos divergentes”, creo que se refiere a que uno responde más a intereses comerciales e industriales y su método como que es más científico y al fin y al cabo más atinado, me parece.
No quiero decir con esto que quien hace encuestas es un simple engrane más del sistema capitalista y acaparador, ¡no!, probablemente ellos entienden mucho mejor este rollo, pero hay que tomar en cuenta que es redituable hacer encuestas y es mejor tener algo de información que no tener nada.

No hay comentarios.: