martes, septiembre 22, 2009

¿Cómo y cuando responder preguntas?

Vista la importancia de realizar preguntas (carta 1), a quien se le deben de realizar, ahora vamos a intentar explicar cómo es que considero que deben responderse las mismas, antes, por supuesto, hay que hacerse las siguientes preguntas.

I.    ¿Cómo podría usar esta persona la información para afectarme?
II.    ¿Merece que lo sepa mi opinión o mi versión sobre este punto?
III.    ¿Qué quiere escuchar el que pregunta de mí?
IV.    ¿Para qué le sirve la información que le doy?
V.    ¿Vale que le sea respondida toda la pregunta?
VI.    ¿Qué información necesita de mí?
VII.    ¿Qué nivel de conocimientos tiene quien pregunta?

I.    ¿Cómo podría usar esta persona la información para afectarme?

Primera pregunta que debes realizarte, trata que no des información que en el futuro pueda ser usada en tu contra, saber que nivel de confianza otorgar a los que te rodean es para otro tema.
II.    ¿Merece que lo sepa mi opinión o mi versión sobre este punto?

Para meterse en broncas gratuitas y debatir pendejadas debes responder cada cosa que te pregunten, sobre todo si se trata de política y religión. ¡Ah! nunca le respondas a una mujer ¿Cómo me veo?, porque lo que le respondas, sea positivo o negativo, será usado en tu contra por el resto de tu vida.
Hablar de política y religión no tiene nada de malo, aconsejable sería hacerlos con quien de verdad desee comprender más de ese tema.

III.    ¿Qué quiere escuchar el que pregunta de mí?
No es necesario quedarse callado, a veces basta con darles el avión, pero hay gente que nunca se le puede dar gusto, respondas lo que respondas, sobre todo si esta en un ataque neurótico. Preguntarse que es lo que el otro quiere escuchar de ti te resolverá bastantes bronquitas ya que hay gente que hace preguntas por distintas razones, una de ellas es para hacer plática, otra es ora satisfacer sus ansias de corroborar con otros sus suposiciones y otra mas por que no tienen en que entretenerse.

IV.    ¿Para que le sirve la información que le doy?

Tal vez las preguntas van encaminadas a obtener información de algo o de alguien para hacer daño, hay que cuidar no dar información que pueda afectar a un tercero, cobre todo cuando se sospecha que la pregunta va encaminada al fin de atacar a un tercero.

V.    ¿Vale que le sea respondida toda la pregunta?

Hay veces en que es mejor dejar un huequito de duda para que el que pregunta investigue por su cuenta y de este modo se le incite a la investigación, otra de los generadores del conocimiento.

VI.    ¿Qué información necesita de mí?

No necesariamente tenemos que dar todo lo que tenemos de información respecto a ese tópico, muchas veces saturamos a la gente con información cuando lo que quiere es solo un esbozo del concepto, cuando se dice todo lo que se sabe se corre el riesgo de ser molesto y aburrido.

VII.    ¿Qué nivel de conocimientos tiene quien pregunta?

Las respuestas tienen que darse en el idioma del que pregunta, la Biblia habla del famoso don de lenguas, este Don se pude interpretar de varias maneras, uno es que en aquella época Babilonia, por ejemplo, era como el D.F. de aquel entonces, se congregaba gente de todos lados para comerciar e intercambiar conocimientos entre otras actividades; imagina que en cada estado de la republica se hablara un idioma diferente, ¡como predicar una idea o un punto de vista ante una multitud de todos los estados! así era Babilonia; pues bien, el don de lenguas no es mas que la milagrosa capacidad de hablar a un público multilingüe y ser entendido por todos ellos hablando en nuestro propio lenguaje, esto es, convertido a la explicación del punto tratado aquí, que nosotros debemos obrar el milagro del hablar el idioma del albañil, del político y del contador. Era algo que hacia Jesús Cristo muy seguido, pues cuando andaba de gira, un día le tocaba hablar ante pescadores y otro día echarse su discurso ante campesinos, ¡como candidato a diputado!
Aprendió a hacer llegar sus altos conocimientos a la gente más ignorante, el cómo hacerlo requiere de atención porque es la panacea de la comunicación.

a)    Hablar de las cosas que lo rodean (o suponemos que le rodean) en su trabajo o actividad favorita.

b)    La forma más sencilla de explicar un conocimiento, es como se aplica este a la vida diaria, lo que se conoce comúnmente como EJEMPLOS Y CUENTOS.


Haciéndole al testigo de Güeobá

Si yo hubiese vivido en el año 25 ó 35 después de Cristo  y me presenciara ., por ejemplo, un grupo de mercaderes (los mercaderes en esa época eran los billetudos) que podían ellos entrar en el reino de Dios, les respondería que es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja , que un rico entre al reino de los cielos, porque la mercancías las trasportaban en camellos y la aguja era conocida y usada constantemente por ellos porque el tráfico de telas era, después de las joyas, el negocio más redituable. Imagínate si les hubiera dicho algo así como que los bienes materiales impiden encontrar la verdad.
Le preguntaron a Cristo, como le haría dios para distinguir al final de los días al bueno del malo, a lo que les dijo que el reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró trigo en su campo , pero al tiempo de dormir los hombres, vino un enemigo suyo y sembró cizaña  (que es en apariencia cercana al trigo ) en medio del trigo y estando ya el trigo a punto de ser cosechado se descubrió con ella la cizaña.
Entonces los recolectores acudieron al dueño del campo y le dijeron: Patrón, ¿no sembraste trigo en tu campo?; pues ¿cómo tiene cizaña?
Algún enemigo mío la habrá sembrado, le dijo.
¿Quieres que la tumbemos?, le contestaron.
A lo que contesto: ¡No, no chinguen!, no vaya a ser la de malas que, arrancando la cizaña, arranquen el trigo también y luego, ¿Qué vendemos a los acaparadores ?
Pues, ni modo, dejen que crezcan juntos la cizaña con el trigo y cuando sea la cosecha, voy a dar instrucciones para que ya cortada separen el trigo de la cizaña metan trigo en mi granero y la cizaña la hagan manojos para hacer fuego. Fin.
Si hubiera hablado con panaderos seguramente les habría hablado de harina y levadura .
Solo a sus alumnos les explicaba con profundidad sus técnicas y más profundamente su rollo . Porque si no corría el riesgo de que lo tomaran mas de a loco y nadie lo iba a entender, ¡si de por sí!, al güey le costaba que la raza entendiera que pedo con su “buena nueva” imagínate si explicaba sus ondas, acá, filosóficamente y todo el pedo, ¡pues no!

Y hasta ahí le dejo porque ya me aburrí

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